martes, 24 de mayo de 2011

Patio Norte o Patio 3. Corredor 1, murales 1-2


biznagas
                1.1 Atetelco. Sección norte, Teotihuacán.
                1.2 In situ.
1.3 Integrados a un pasillo  que conduce a un patio central delimitado por aposentos porticados en sus lados este, norte y oeste. El mural 1 tiene como base un muro vertical que se orienta hacia el norte, y el mural 2 también está aplicado sobre un muro vertical y se orienta hacia el este. Al parecer corresponden al mismo nivel del Patio Pintado, por lo que deben ubicarse aproximadamente entre los 450 y 600 años d.C.
1.4 No hay datos de la fecha de su descrubiemiento, quizá durante las exploraciones de 1950 a cargo del arqueólogo C. Margain. INAH.
2.2 Aunque en la actualidad el mural 1 se encuentra algo manchado por efectos de la humedad en las paredes cercanas, pueden distinguirse, con suficiente claridad, los colores empleados y las figuras representadas, incompletas porque se perdió su parte superior.
Fueron fileteados sus bordes y consolidada la pintura en 1982. Actualmente se encuentran protegidos de las lluvias y de los rayos del sol por una cubierta provisional.
3.1 en sus dimensiones se aprecia que el mural 1 tiene 98 cm. De ancho por 80 cm. De alto; el mural 2 mide 108 cm. De ancho por 75 cm. de alto.
3.2 Figuras polícromas en dos tonos de rojo, tres tonos de ocre, azul, amarillo y verde.
4.1 Vista en su conjunto se trata de una representación bastante compeja que Séjourné identifica como una imagen heráldica.
El mural 1 se integra a un contexto de flores y guías que se dirigen hacia abajo, apenas visibles por su imperceptible color que se confunde con el color amarillento del muro. Resalta en la parte central una figura polícroma compuesta de varios elementos; dos bandas que se cruzan en su centro para formar una figura en forma de X con adornos interiores en sus extremos de pequeñas figuras ovaladas en colores rojo, amarillo, ocre y azul, sobre este elemento en forma de X se superpone otro de forma semicircular, abierto hacia abajo y adornado de pequeñas placas triangulares colocadas en su borde exterior en un arreglo simétrico. Van pintados con delgadas franjas transversales de color rojo, amarillo y azul. También en posición simétrica, salen hacia los lados de la figura central dos grandes cuchillos curvos cuyas puntas sen gancho giran hacia abajo, de ellas le escurren gotas de color rojo. Los cuchillos van pintados en rojo y en azul a lo largo de su eje longitudinal, separados por una línea quebrada o en forma de sierra. Pende hacia abajo del centro de la figura semicircular un fruto con una flor delineada en azul. El fruto está cortado longitudinalmente, y lleva largas espinas verdes y rojas. La flor vista de perfil, se forma de tres pétalos y está pintada de un amarillo fuerte. Ambas figuras parecen representar el corte longitudinal de una biznaga con flor, semejante a la flor de nopal.7
Por arriba y separados de la figura semicircular, se muestran dos tallos de cactus que bajan en diagonal hacia los lados. Estos se forman de elementos triangulares en grupos de dos que se superponen uno sobre otro. Están pintados de rojo, amarillo y azul, igual que los bordes de las placas que adornan el semicírculo, por lo que debe tratarse de la misma especie de cactus que se representa en perfil y cortado en sección. Cuelgan de estos tallos varias guías de flores con pétalos muy largos como si fueran cortadas en tiras longitudinales, para simular flecos o borlas de adorno.



Atetelco. Patio Norte o Patio 3. Cuarto 1, murales 1-4 ( círuclos rojos segmentados).

En un dibujo preparado por el señor Santos Villasánchez restaurador de la zona arqueológica, basándose en el mural 2 y en la cenefa que lo enmarcaba, se reconstruye la figura completando los elementos faltantes. Se observa en este dibujo, que arriba de la figura 1 considerada como una insignia heráldica, aparece otra de igual composición, salvo que, en vez de contener una biznaga, sale del interior del elemento semicircular una pata de ave con tres garras.
En el mural 2 se distinguen dos figuras separadas. En la parte central aparece la misma referida en el mural 1 donde se observan colores semejantes y la misma composición, por lo que no es necesario repetir su descripción.
En el borde del mural hacia su lado sur, se representa la cenefa que consiste en una amplia franjavertical de 37 cm, de ancho. Está delimitada hacia sus lados por dos delgadas franjas en color verde, las que a su vez se forman por delgadas líneas rojas. En la cenefa se representan dos figuras iguales colocadas una seguida de la otra, ocupando su espacio central, y que por su distribución se comprende que éstas se repetían hacia arriba a distancias regulares.
Los motivos representados en la cenefa son los mismos que se presentan en los murales 1 y 2. Es decir, se repiten los emblemas heráldicos formados por figuras semicirculares abiertas hacia abajo y adornados sus bordes con pequeñas placas triangulares. La diferencia que existe entre estas figuras y las del tema central es que de su interior sale hacia abajo una flor estilizada con tres pétalos de color amarillo, y hacia los lados destacan dos garras de una pata  de ave en color rojo y azul, y por debajo de éstos se reconoce un diseño en forma de palma.
Dentro de esta cenefa, a ambos lados de la figura centrales, aparecen nueva mente los tallos de cactus, pero en este caso no bajan diagonalmente sino que tienen una dirección vertical hacia abajo.

Patio Pintado o Patio 2, murales 1-5



el adoratorio central del Patio Pintado

1.1   Atetelco. Patio Pintado. Adoratorio central, Teotihuacán.
1.2   Desprendidos clandestinamente de su lugar de origen.
1.3   Se integraban a un altar central del llamado Patio Pintado, decorado por las cuatro fachadas de los tres cuerpos escalonados de la pequeña estructura. El primer cuerpo se forma por un talud y una moldura. El talud es monocromo en un color rojo y la moldura iba profusamente decora con varios colores. El segundo y el tercer cuerpo se forman con muros den talud y tablero, y sobre este último hay actualmente una fila de pequeñas almenas talladas en roca; debieron estar también cubierta con pintura sobre el estuco, como se muestra en una pieza original que se encuentra en su lugar correspondiente. Sobre el pequeño basamento se levanta un templo compuesto con muros en talud y tablero.  No se cuenta con datos acerca de la decoración del templo. Participa de la misma cronología adjudicada al Patio Pintado que va de los 450 a 600 años d.C.
1.4   Descubiertos, durante las excavaciones del INAH en 1947-1950, por los arqueólogos P. Armillas y C Margain.
2.1 Parte de los murales sobre las piedras estucadas y pintadas del templo, fueron desprendidas clandestinamente de su lugar y traficadas hacia el extranjero
2.2 Se cuenta con pocos fragmentos originales, testigos suficientes que dieron la base necesaria para llevar a cabo la restauración completa de la pequeña estructura de piedra que iba cubierta totalmente con los murales. Su reproducción se muestra aquí y en la publicación de Miller.
3.1 La estructura sobre cuyas paredes se encontraban estos murales está orientada hacia el oeste, y  tiene una planta rectangular de 288 cm. En sus lados norte y sur; 253. En sus lados este y oeste, la altura, inclyendo sus tres cuerpos, es de 213 cms.
Primer nivel: molduras del primer cuerpo, ancho 15 cm.
Segundo nivel: talud del segundo cuerpo, ancho 13 cm.
Tercer nivel: tablero  del segundo  cuerpo incluyendo las molduras. Entrecalle, cancho 18 cm, y moldura con un ancho de 9 cm.
Cuarto nivel: talud de tercer cuerpo, ancho 10 cm.
Quinto nivel: tablero del tercer cuerpo incluyendo las molduras. Entrecalle, ancho 10 cm. Y molduras con un ancho de 15 cm.
4.1 Como los motivos representados se repiten en los cuatro lados de este altar, su descripción se hace solamente  de su fachada norte, siguiendo un orden de acuerdo a sus diferentes niveles a partir del nivel inferior.
En la moldura del primer cuerpo en su primer nivel se representan dos serpientes emplumadas que se asocian con mascarones de Tláloc y figuras repetidas del signo conocido como el quincunce. Las serpientes se dirigen hacia el centro de la  fachada encontrándose de frente. Llevan la cabeza cubierta con una malla o entrelaces, además de los elementos que caracterizan a la serpiente en otras representaciones de Teotihuacán.
Es decir,  una voluta o espiral que va por arriba de su ojo de forma elíptica, y que gira hacia atrás enrollándose después hacia arriba, elemento que también va reticulado y cuyos bordes se adornan con plumas, y en su interior se repiten a intervalos regulares, cuatro figuras rectangulares del llamado quincunce o símbolo cosmogónico. Lleva el hocico entreabierto mostrando sus agudos dientes, y los bordes de los belfos van también emplumados y reticulados donde aparece nuevamente la figura del quincunce. Se extiende de su hocico una amplia franja ondulada, compuesta de tres bandas colocadas una sobre  la otra. La de más arriba se forma por una sucesión de espirales o volutas y de las dos siguientes caen gotas celestes. El cuerpo del reptil se forma de varias franjas de plumas, que se alternan con hileras de círculos concéntricos, y bandas conocidas como doble peine sobre las que se aplica nuevamente el rectángulo del quincunce.
En medio del cuerpo de la serpiente resalta un mascarón visto de frente o figura estilizada Tláloc, con los elementos que le caracterizan, es decir, lleva orejeras circulares, ojos formados con círculos concéntricos, colmillos de jaguar y lengua bífida. Arriba de los ojos, simétricamente distribuidos se representan los belfos de una serpiente; y finalmente la silueta de la c ara se enmarca con pequeños círculos adornados hacia el exterior con pequeñas plumas. Son los mismo que adornan sus cejas y que Von Winning identifica como un resplandor de uñas felinas.
El crótalo de la serpiente ser forma de cuatro cascabeles adornados con círculos pequeños y el último crótalo remata con una figura de doble voluta. Finalmente la cola remata con unahilera de círculos colocados en hileras transversales. En la policromía de este mural se emplea un color verde den dos tonos, tres tonos de rojo incluyendo el fondo, además de un color blanco en los ojos y en los colmillos de la serpiente.
Hay dos serpientes representadas en la moldura del primer cuerpo del adoratorio. Cada una contiene doce figuras del quincunce y dos mascarones de Tlátloc. Por lo tanto, debieron existir un total de ocho serpientes iguales en las cuatro fachadas de este primer nivel.
En el segundo nivel o talud del segundo cuerpo se perciben varias figuras estilizadas de conchas y caracoles colocadas en franja, una a continuación de la otra y por arriba de los espacios que forman una hilera de líneas paralelas entre sí, colocadas verticalmente a lo largo del talud que por tener a la vez pequeñas rayas salientes se les conoce como figuras de doble peine ( Von Winning, 1987).
El mural  en el tablero del segundo cuerpo se forma de varios elementos simbólicos. Se muestra un cordón representado por bandas entrelazadas, en cuyo interior se mira una secesión de pequeños círculos. Este cordón forma nudos o amarres, repetidas veces a intervalos regulares, y estos nudos alternan con una figura rectangular formada por tres bandas horizontales; en la banda inferior se representan colmillos de jaguar según Von Winning. La banda del centro se divide a su vez en tres partes verticales. Hacia los lados van representadas las figuras del quincunce y en medio se representa un nudo o entrelazado, y los tres elementos quedan enmarcado en un cuadro. En la franja superior se muestra una hilera de plumas colocadas verticalmente. Está compuesta de tres bandas, se refiere, según Von Winning, a una figura heráldica.



Atetelco. Patio Norte o Patio 3. Corredor 2, mural 1 (biznaga). Dibujo de José Francisco Villaseñor, según Santos Villasánchez.



En cada lado, sobre este nivel o tablero del segundo cuerpo, se representa tres veces la insignia heráldica, y cuatro veces el nudo con las bandas entrelazadas que se alternan entre sí.
En las molduras de los tableros del segundo cuerpo en casa lado del edificio se representan las mismas bandas entrelazadas sin el complicado nudo, solamente van retorcidas  enmarcando a intervalos regulares un medallón o disco ovalado de borde con flecos. En su parte central aparece nuevamente la cruz con los cinco puntos, o el llamado quincunce. Para Von Winning significan jade-turquesa.
En el talud del tercer cuerpo, se repiten los mismos motivos representados en el talud del segundo cuerpo. Es decir, hay aquí colocadas en una fila horizontal figuras estilizadas de conchas y caracoles en representaciones diferentes.
El tablero de este cuerpo y sus molduras se adornan profusamente. En el tablero se representa el llamado Tláloc B con los elementos  que lo caracterizan: orejeras, anteojeras, colmillos de jaguar y lengua bífida. Lleva una banda bifurcada en la cabeza que cae hacia los lados, sobre ella se aplican entrelaces y cuatro pequeñas figuras rectangulares que conforman el repetido quincunce. Dos penachos de plumas se colocan hacia los lados, con cinco turquesas verdes según Von Winning. Además se representa nuevamente el quincunce y de acuerdo con el dibujo de Miller, se miran en este panel cinco figuras de Tláloc B.
En las molduras superior e inferior de este tablero se representa la serpiente emplumada dirigida hacia el centro de la fachada. Son estas serpientes, similares a las del tablero del primer cuerpo, pero hay detalles significativos que las distinguen; por ejemplo, en la cabeza llevan seis figuras del quincunce en vez de siete. En el cuerpo se representa  cuatro veces el signo “cuatro turquesa”, o la figura del quincunce con cuatro círculos pequeños; estos símbolos se alternan con hileras de colmillos de jaguar y penachos de plumas. Del hocico de la serpiente brotan chorros de agua, y su crótalo remata con una doble voluta adornada con una hilera de dientes de jaguar y un penacho de plumas. En las molduras laterales aparecen los discos o figuras ovaladas, en cuya parte central se muestra el quincunce o signo cosmogónico.
Las pequeñas almenas que se aprecian sobre la moldura superior del tercer cuerpo han sido todas, menos una, restituidas a su lugar de origen, con  materiales similares pero de elaboración reciente. La única pieza original muestra restos de pintura en muy mal estado de conservación. No es posible definir los motivos que en ella fueron representados. Igual ocurre con el pequeño templo, ubicado sobre este basamento, pero debe suponerse que estaban también profusamente pintados, como se muestra en los tres cuerpos del adoratorio en los dibujos  reconstructivos que Miller presenta,y que algunos fragmentos originales corroboran como verídicos.

Pórtico 2, murales 5-7 
 Bandas entrelazadas y figuras antropomorfas con pectoral de caracol.”
Origen:  Atetelco. Patio Blanco. Templo Este. Teotihuacan.
Ubicación: in situ
Descubiertos por: P. Armillass 1945 y C. Margain 1950 INAH.
Medidas: Laterales área porticada, 240cm de largo X 230cm de alto y el mural frontal mide 510cm de largo X 230cm de alto.

Reconstruidos casi en su totalidad, salvo pequeños fragmentos originales. En un reticulado de anchas franjas diagonales entrelazadas, cuya estructura es parecida a la de una malla pero formando espacios de forma cuadrangular, se ubican figuras humanas que portan un complicado atuendo que se identifica como el señor Quetzalcóatl. Las franjas entrelazadas van adornadas con flecos en sus bordes internos. En su parte central lleva una sucesión  de figuras circulares y ovaladas, alternadas entre sí.

El personaje ubicado en cada centro de la retícula va ricamente ataviado, destacándose por su tamaño un gran caracol que a manera de emblema pende sobre su pecho. Se trata de un instrumento musical, un caracol emplumado con una boquilla en uno de sus extremos de donde sale la vírgula del sonido con gotas, y un adorno circular en el otro extremo, donde también emerge una vírgula con gotas.
Lleva sandalias con altos talones y una borla o mata en el empeine.
Porta faldellín o calzones cortos orlados, mostrándose por atrás, cerca de su hombro, un gran espejo, broche o texcacuitlapilli profusamente adornado con plumas y cintas que le cuelgan. Lleva orejeras circulares y nariguera de Tláloc, con colmillos de jaguar, se muestra parte de su pelo por debajo de su gran tocado, el cual consiste en una ancha diadema formada por varias franjas. En la más completa se ven adornos con figuras circulares y ovaladas que aparecen en las bandas entrelazadas. Más arriba se ve el perfil de un ave con el pico ganchudo y el ojo redondo decorado con plumas, el cual porta a su vez una diadema de triángulos. El tocado del personaje termina con un penacho de largas plumas que cuelgan por atrás; sobre el elemento circular se encuentra un pequeño moño y sobre éste se levantan dos elementos flamígeros. Además de las vírgulas que le salen del caracol en sus extremos, hay otra que le sale de la boca del personaje, adornada también con cuadretes y gotas que le escurre.  Las figuras humanas así mostradas de perfil llevan la misma dirección que los jaguares y coyotes de los murales 1-4 de éste pórtico. Es decir, las que aparecen en los muros lateralesse dirigen hacia afuera, en tanto que los personajes que se representan en el mural frontal se dirigen hacia el centro del templo.


En los muros laterales hay diez personajes completos y dos incompletos dirigidos hacia afuera y el espacio frontal contiene dieciocho figuras completas y seis incompletas que se dirigen hacia el centro.

Cenefa
Los tres grandes panales van enmarcados por un amplia cenefa formada por varias bandas.
La más amplia, en el interior, se compone de franjas entrelazadas, una de las cuales se adorna con cuchillos de obsidiana colocados como palma sobrepuesta. La otra banda presenta el pelaje del coyote sobre el que se aplican figuras triangulares. En ella se representan, intervalos regulares, patas desmembradas de coyotes alternadas con medallones o emblemas con la cara de Tláloc.

Las patas de coyote colocadas uniformemente, van adornadas con un mechón de plumas y pelos largos. En la cenefa del mural frontal éstas siguen una dirección hacia el centro, es decir, las que se encuentran en el lado izquierdo se dirigen hacia la derecha y las del lado derecho se orientan hacia la izquierda.  El medallón  con la representación de Tláloc, muestra las clásicas orejeraras formadas por círculos concéntricos, al igual que sus anteojeras, labio y bigotera estilizada, tres colmillos y su lengua bífida. La figura de Tláloc lleva un tocado adornado con cintas de piel de coyote, los cuales cuelgan hacia los lados y van sostenidas con tres botones y tres pequeños colmillos colocados en su parte superior.
Las bandas que completan esta ancha cenefa en su lado exterior son las siguientes: la primera franja se forma de una sucesión de figuras en forma de media luna; enseguida lleva una delgada franja como cordel adornada con líneas transversales a manera de flecos.
La cenefa en el mural frontal tiene una composición simétrica de sus elementos. En el centro se encuentra el medallón con la representación de Tláloc, un total de once figuras repetidas: siete en la parte superior y dos a cada lado. Las patas desmembradas se alternan con los medallones son doce en este mural: dos hacia los lados y diez en la parte superior, y se dirigen hacia el centro. La cenefa termina en sus extremos con la cola de coyote, que lleva adornos de figuras trianguliformes, medias lunas y gotas.
La puerta central que da acceso al templo está enmarcada con una ancha franja. Esta va decorada con cuerpos de serpientes entrelazadas y grandes cabezas de un animal que lleva un elaborado penacho en una composición simétrica. Es decir, los motivos se repiten a ambos lados del eje central de la puerta abarcando principalmente sus esquinas superiores.
Una de las franjas que se entrelaza presenta una sucesión de cuchillos como plumas o escamas y la otra semeja la piel de coyote, con aplicaciones de figuras en triángulo a intervalos regulares. Las cabezas  que se encuentran en los extremos de los entrelaces muestran elementos de serpiente, pájaro y de jaguar. Representan, como ya se dijo, cabezas de coyote que se identifican por la presencia de pequeñas rayas que imitan el pelo de este animal.
Tienen las fauces abiertas, en donde se observa su dentadura y una lengua bífida que cuelga entre la exuberante vírgula. Sus ojos son redondos, como de pájaro, formados por líneas concéntricas. Lleva un abanico de largas plumas, detenidas por una banda de figuras triobuladas, hacia atrás le  cuelga una cinta de aplicaciones de tres figuras que parecen borlas y que se denomina “parábola palmeada”. Las vírgulas en grupos de dos y de tres que emite el animal van adornadas con líneas onduladas y llevan signos de corazones vistos en sección y en planta; eso identificando mediante las figuras triobuladas. De las anchas vírgulas, cuyos márgenes se adornan con orlas, se forman varias gotas alargadas.

Pórtico 2, murales 5-7    Bandas entrelazadas y figuras antropomorfas con pectoral de caracol.




  

Pórtico 3, murales 1-4
 “Figuras humanas danzando talud”.

Origen:  Atetelco. Patio Blanco. Templo Norte. Teotihuacan.
Ubicación: in situ
Cronología: 300-400 años d.C.
Descubiertos por: P. Armillas 1945 y C. Margain 1950 INAH.
Medidas: Los murales laterales 1y4 tienen un ancho de 220cm por 80cm de alto incluyendo las cenefas que los enmarcan; los murales 2 y 3 tienen 150cm de ancho por 80cm de alto, sin las cenefas.

Descripción.

Se encuentran simétricamente ubicados en los cuatro murales y representan seis figuras humanas vistas de perfil y profusamente ataviadas. Hay un personaje con dirección hacia afuera del pórtico en cada uno de los muros laterales (murales 1-4), y dos figuras humanas en cada uno de los murales  2 y 3 que se dirigen hacia el eje central del templo. Se encuentran de perfil y sus pies coinciden con la franja horizontal inferior de un marco que encierra la figura. En realidad se refiere a la parte superior de una plataforma vista en planta. Varias huellas de pies aparecen sobre el enmarcado espacio rectangular, razón por la cual, se ha interpretado a estos personajes como danzantes, actuando sobre la plataforma presentada en planta, la cual muestra  hacia sus cuatro lados amplias escalinatas delimitadas por alfardas, y con círculos concéntricos o chalchihuites en los tableros.

Su indumentaria consiste en sandalias con grandes hebillas cuadrangulares, faldellín o calzón ribeteado con flecos. Dos anchas cintas adornadas con figuras geométricas le cuelgan por detrás y por delante; una prenda formada por largas plumas y en forma de abanico luce por detrás, sostenida al parecer por un gran broche semicircular o tecacuitlapilli, Este está adornado y rematado con un nudo o moño, además de las bandas que presentan una especie de borla o elemento palmeado ( Langley), y que van uno a continuación del otro unidos por una línea. Lleva tres hileras de collares, uno de los cuales se forma con grandes círculos concéntricos, el otro con figuras triobuladas vistas en sección y el más delgado se compone de líneas verticales simulando un cordón. Sus grandes anteojeras van colocadas sobre un antifaz que le cubre la mitad del rostro. El fastuoso tocado consiste en una banda horizontal, con ganchos como garras que salen hacia arriba y hacia debajo de pequeños espacios cuadrangulares. Esta banda descansa sobre una diadema acolchonada; en seguida va un gran atado o moño colocado horizontalmente de donde se levantan en diagonal dos franjas adornadas con las mismas figuras de elementos palmeados, y en la parte central aparece el” trapecio y el triángulo” o signo del año. Resaltan más arriba tres grandes cuchillos. Finalmente, el gran tocado remata con largas plumas arqueadas hacia atrás.

Dos grande vírgulas de la palabra, adornadas con cuadretes en grupos de tres, le salen de su boca. Además de su rico atuendo cada figura humana porta en una de sus manos un gran cuchillo curvo con mango que atraviesa un corazón sangrante.

Con la otra mano sostiene tres lanzas o dardos que apuntan hacia atrás y que sostiene con un paño ritual de piel de coyote.

Cenefa
La cenefa que delimita a estos murales es también bastante ostentosa. En ella resaltan cinco grandes figuras de Tláloc que se aplican sobre el marco que delimita, en tres de sus lados, a estos murales. Se compone de varias de varias bandas y dos franjas entrelazadas y adornadas. Una de las franjas entrelazadas se decora con una sucesión de figuras trianguliformes parecidas a los tallos de una especie de cactus; la otra banda se adorna con las figuras que se han denominado “elementos palmeados “ (Langley 1986). Referente a las otras franjas colocadas en el exterior de la cenefa, una de ellas se forma de pequeñas rayas transversales que simulan un cordón, enseguida va una línea ondulada y finalmente se encuentra una fila de cuchillos curvos colocados transversalmente, que dan a la cenefa en su conjunto una apariencia de flecos en sus bordes. Sobre estas bandas entrelazadas se colocan distancias regulares cinco medallones formados con la máscara de Tláloc; llevan anteojeras, orejeras y un collar de grandes cuentas circulares. Su tocado está compuesto de dos cintas de piel de coyote que cuelgan hacia los lados y tienen tres botones y figuras triobuladas colocadas diagonalmente hacia los lados, en su parte central se encuentra el signo del año. Su tocado remata hacia arriba y hacia los lados con un amplio penacho de plumas.
Al personje en actitud de danzar se le asocia con el señor de la mañana o  Tlahuizcalpantecuhtl, Quetzalcóatl, un guerrero celeste según Séjourné, otros autores lo relacionan con un personaje asociado a la guerra y a la fertilidad (Von Winning 1987).



Pórtico 3, murales 1-4  “Figuras humanas danzando talud”.







Pórtico 3, Murales 5-7
“Muros reticulados con figuras humanas y de animales.”
Origen: Atetelco. Patio Blanco. Templo Norte. Teotihuacán.
Ubicación: in situ
Descubiertos por: P. Armillas 1945 y C. Margain 1950 INAH.
Medidas: Los murales laterales miden 220cm de ancho por 240cm de alto, incluyendo la puerta central que da acceso al templo.

Descripción.

Consiste en un reticulado formado por bandas diagonales unidas con medallones que estructuran diseños en forma de rombos, en cuya parte central se encuentran figuras humanas y de animales ricamente ataviadas. Las bandas que forman la retícula se componen, a su vez, de tres delgadas franjas, la más ancha, ubicada hacia el inferior, lleva alrgados colocados en número de tres a intervalos regulares, y alternados con una sucesión de pequeñas líneas. La franja intermedia se forma de pequeñas ondas rítmicamente odernadas, como olan de la primera franja, y la franja exterior lleva una sucesión de pequeñas placas superpuestas colocadas una a continuación de la otra.
Los medallones, que unen las bandas diagonales, son de fprma ligeramente ovalada formados de líneas concéntricas adornadas alrededor con las mismas placas triangulares que llevan las bandas diagonales.
Sobre cada medallón, desplazada hacia su parte inferior, se encuentra un ave estilizada vista en su parte superior con la cola y las alas extendidas y con dirección hacia arriba. Su pico es ganchudo y sus ojos redondos, lleva por detrás, sostenido con un moño, el signo del año en forma invertida.

En los murales laterales, en los espacios formados por la retícula, se representan figuras humanas de perfil, ricamente ataviadas que se dirigen hacia afuera del pórtico. Con una mano sostienen, mediante un paño ritual, tres lanzas que tienen borlas y las puntas hacia atrás. Con la otra portan un elemento alargado ligeramente ondulado. Su complicado atuendo consiste en sandalias con grandes hebillas, faldellín o calzones cortos. Llevan por detrás un adorno de largas plumas con borlas sosteniendo un disco o medallón con moño, colocado a la altura del hombro, franjas rayadas o cintas caen sobre sus hombros y sobre un antifaz obscuro se dibujan sus orejeras y anteojeras. Su gran tocado consiste en varias bandas superpuestas con diversos elementos simbólicos: la que asienta directamente sobre su cabeza  es más delgada y tiene pequeñas líneas; sobre esta se encuentra una banda en forma de tablero que contiene tres figuras circulares, como flores con pétalos en cuya parte central representan las figuras triobuladas. Más arriba se observa un gran nudo puesto horizontalmente que sostiene un fajo de largas plumas que ondean por detrás  hacia donde cuelga ancho festón con los signos del elemento palmeado. Sobre el nudo se ve el trapecio y el triángulo o signo del año con dos tableros diagonales que también van adornados con los elementos palmeados, según Langley (1986), o las múltiples gotas, según Von Winning (1987). Finalmente, en la parte superior lleva un gran penacho o aureola formada por un armazón  de varas con borlas y pequeñas plumas. Le sale de su boca una vírgula del canto o de la palabra decorada con cuadretes en grupos de tres, y frente a este personaje hay un ave que revolotea, con el pico abierto y con gotas que le brotan de su cabeza a causa de golpe o corte que recibe del personaje mediante el implemento que porta en una de sus manos.

En el mural frontal los espacios romboidales de la retícula se ocupan con figuras antropomorfas disfrazadas de aves que caminan hacia la parte central, es decir, las figuras que se encuentran en el lado derecho se dirigen hacia la izquierda y las del lado izquierdo se dirigen hacia la derecha. Los elementos que lo identifican como figura humana son su posición erguida, e sus manos y parte de su indumentaria, pero lleva cabeza de ave vista de perfil con su enorme pico ganchudo además de sus patas, y una de sus manos, ambas con garras.

Atuendo: lleva sandalias atadas con un nudo con grandes hebillas cuadrangulares. Sus calzones orlados le cubren hasta la rodilla, y con una mano sostiene, mediante un paño ritual, tres dardos con borlas mal dibujados ya que sus puntas dirigidas hacia atrás no corresponden con sus tres bases que se encuentran delante del personaje. En la otra mano lleva un guante con garras de ave, con esta sostiene un elemento compuesto de un nudo, el signo del año, y dos franjas colocadas diagonalmente hacia los lados. Son estos mismos elementos que se observan en su tocado, además de un figura terminada en dos puntas como una lengua bífida adornada con plumas. En ambas manos lleva paños orlados pero diferentes. Luce sobre su hombro un gran broche redondeado con plumas y un nudo transversal  atando un elemento rectangular  como el que se encuentra en su tocado; con este elemento sostiene a la vez un elaborado lienzo  que cubre su torso. Su gran tocado se forma de diversos elementos simbólicos representados en varias bandas superpuestas: la banda inferior que va en contacto con la cabeza del animal es lisa, le sigue una banda en forma de tablero con dos figuras circulares que enmarcan los signos triobulados; continúa con nudo horizontal sobre el cual se representa el signo del año con dos franjas, paneles o tableros diagonales colocados hacia los lados, y adornados con el elemento palmeado. Finalmente lleva exuberante penacho formado de largas varas que rematan en sus extremos con borlas circulares y plumas cortas además de una cola de ave que luce por detrás de la altura de la cintura. Tienen como collar un listón de líneas cortas además de cuentas circulares. El tocado visto en conjunto es similar a los de las figuras representadas en los murales laterales. Lo que distingue a este personaje es el disfraz que porta, motivo por el cual ha sido considerado como un                  ” Caballero Águila “ (Séjourné 1957); se distingueprincipalmente su enorme cabeza con su pico abierto sin la vírgula del sonido.

Cenefa

La franja que enmarca estos murales consiste en varias bandas paralelas entre sí. La más ancha, ubicada hacia el interior, va adornada con plumas en línea de tres o cuatro sobre las que se aplican a intervalos regulares algunas conchas estilizadas. La segunda banda es más delgada y lleva círculos concéntricos; le sigue otra también delgada de triángulos equiláteros, y finalmente, hacia el exterior, la cenefa termina con una franja formada de líneas transversales. 


Sobre la cenefa se colocaron a intervalos regulares grandes medallones cuadrangulares redondeados en sus esquinas.  Están compuestos por una ancha banda adornada con cuchillos y plumas y conchas marinas y a sus extremos se representa de perfil una figura zoomorfa que apoya sus patas traseras en el piso en posición de reposo. Lleva un pectoral de conchas y plumas y porta un gran tocado que asienta sobre su diadema. Junto a su lengua alargada le sale una vírgula que se enrosca hacia abajo. La orientación de estos animales enmarcados por los medallones es la misma que tienen los personajes representados en los espacios delimitados por las franjas diagonales. Por la forma del cuerpo y la cabeza y porque lleva el cuerpo con entrelaces podría tratarse de un felino, aunque su hocico y su nariz se parecen más a las de un cánido.


Atetelco. Patio Blanco. Pórtico 3, Murales 5-7 Cenefa según (Villagra 1971)
















sábado, 21 de mayo de 2011

ATETELCO Patio Pintado o Patio 2, murales 1-5


El adoratorio central del Patio Pintado

-   Atetelco. Patio Pintado. Adoratorio central, Teotihuacán.

-   Desprendidos clandestinamente de su lugar de origen.

-   Se integraban a un altar central del llamado Patio Pintado, decorado por las cuatro fachadas de los tres cuerpos escalonados de la pequeña estructura. El primer cuerpo se forma por un talud y una moldura. El talud es monocromo en un color rojo y la moldura iba profusamente decora con varios colores. El segundo y el tercer cuerpo se forman con muros den talud y tablero, y sobre este último hay actualmente una fila de pequeñas almenas talladas en roca; debieron estar también cubierta con pintura sobre el estuco, como se muestra en una pieza original que se encuentra en su lugar correspondiente. Sobre el pequeño basamento se levanta un templo compuesto con muros en talud y tablero.  No se cuenta con datos acerca de la decoración del templo. Participa de la misma cronología adjudicada al Patio Pintado que va de los 450 a 600 años d.C.
-  Descubiertos, durante las excavaciones del INAH en 1947-1950, por los arqueólogos P. Armillas y C Margain.

- Parte de los murales sobre las piedras estucadas y pintadas del templo, fueron desprendidas clandestinamente de su lugar y traficadas hacia el extranjero 

- Se cuenta con pocos fragmentos originales, testigos suficientes que dieron la base necesaria para llevar a cabo la restauración completa de la pequeña estructura de piedra que iba cubierta totalmente con los murales. Su reproducción se muestra aquí y en la publicación de Miller.

- La estructura sobre cuyas paredes se encontraban estos murales está orientada hacia el oeste, y  tiene una planta rectangular de 288 cm. En sus lados norte y sur; 253. En sus lados este y oeste, la altura, inclyendo sus tres cuerpos, es de 213 cms.
Primer nivel: molduras del primer cuerpo, ancho 15 cm.
Segundo nivel: talud del segundo cuerpo, ancho 13 cm.
Tercer nivel: tablero  del segundo  cuerpo incluyendo las molduras. Entrecalle, cancho 18 cm, y moldura con un ancho de 9 cm.
Cuarto nivel: talud de tercer cuerpo, ancho 10 cm.
Quinto nivel: tablero del tercer cuerpo incluyendo las molduras. Entrecalle, ancho 10 cm. Y molduras con un ancho de 15 cm.

- Como los motivos representados se repiten en los cuatro lados de este altar, su descripción se hace solamente  de su fachada norte, siguiendo un orden de acuerdo a sus diferentes niveles a partir del nivel inferior.

En la moldura del primer cuerpo en su primer nivel se representan dos serpientes emplumadas que se asocian con mascarones de Tláloc y figuras repetidas del signo conocido como el quincunce. Las serpientes se dirigen hacia el centro de la  fachada encontrándose de frente. Llevan la cabeza cubierta con una malla o entrelaces, además de los elementos que caracterizan a la serpiente en otras representaciones de Teotihuacán. 

Es decir,  una voluta o espiral que va por arriba de su ojo de forma elíptica, y que gira hacia atrás enrollándose después hacia arriba, elemento que también va reticulado y cuyos bordes se adornan con plumas, y en su interior se repiten a intervalos regulares, cuatro figuras rectangulares del llamado quincunce o símbolo cosmogónico. Lleva el hocico entreabierto mostrando sus agudos dientes, y los bordes de los belfos van también emplumados y reticulados donde aparece nuevamente la figura del quincunce. Se extiende de su hocico una amplia franja ondulada, compuesta de tres bandas colocadas una sobre  la otra. La de más arriba se forma por una sucesión de espirales o volutas y de las dos siguientes caen gotas celestes. El cuerpo del reptil se forma de varias franjas de plumas, que se alternan con hileras de círculos concéntricos, y bandas conocidas como doble peine sobre las que se aplica nuevamente el rectángulo del quincunce.

En medio del cuerpo de la serpiente resalta un mascarón visto de frente o figura estilizada Tláloc, con los elementos que le caracterizan, es decir, lleva orejeras circulares, ojos formados con círculos concéntricos, colmillos de jaguar y lengua bífida. Arriba de los ojos, simétricamente distribuidos se representan los belfos de una serpiente; y finalmente la silueta de la c ara se enmarca con pequeños círculos adornados hacia el exterior con pequeñas plumas. Son los mismo que adornan sus cejas y que Von Winning identifica como un resplandor de uñas felinas.

El crótalo de la serpiente ser forma de cuatro cascabeles adornados con círculos pequeños y el último crótalo remata con una figura de doble voluta. Finalmente la cola remata con unahilera de círculos colocados en hileras transversales. En la policromía de este mural se emplea un color verde den dos tonos, tres tonos de rojo incluyendo el fondo, además de un color blanco en los ojos y en los colmillos de la serpiente.

Hay dos serpientes representadas en la moldura del primer cuerpo del adoratorio. Cada una contiene doce figuras del quincunce y dos mascarones de Tlátloc. Por lo tanto, debieron existir un total de ocho serpientes iguales en las cuatro fachadas de este primer nivel.
En el segundo nivel o talud del segundo cuerpo se perciben varias figuras estilizadas de conchas y caracoles colocadas en franja, una a continuación de la otra y por arriba de los espacios que forman una hilera de líneas paralelas entre sí, colocadas verticalmente a lo largo del talud que por tener a la vez pequeñas rayas salientes se les conoce como figuras de doble peine ( Von Winning, 1987).

El mural  en el tablero del segundo cuerpo se forma de varios elementos simbólicos. Se muestra un cordón representado por bandas entrelazadas, en cuyo interior se mira una secesión de pequeños círculos. Este cordón forma nudos o amarres, repetidas veces a intervalos regulares, y estos nudos alternan con una figura rectangular formada por tres bandas horizontales; en la banda inferior se representan colmillos de jaguar según Von Winning. La banda del centro se divide a su vez en tres partes verticales. Hacia los lados van representadas las figuras del quincunce y en medio se representa un nudo o entrelazado, y los tres elementos quedan enmarcado en un cuadro. En la franja superior se muestra una hilera de plumas colocadas verticalmente. Está compuesta de tres bandas, se refiere, según Von Winning, a una figura heráldica.



Atetelco. Patio Norte o Patio 3. Corredor 2, mural 1 (biznaga). Dibujo de José Francisco Villaseñor, según Santos Villasánchez.

En cada lado, sobre este nivel o tablero del segundo cuerpo, se representa tres veces la insignia heráldica, y cuatro veces el nudo con las bandas entrelazadas que se alternan entre sí.
En las molduras de los tableros del segundo cuerpo en casa lado del edificio se representan las mismas bandas entrelazadas sin el complicado nudo, solamente van retorcidas  enmarcando a intervalos regulares un medallón o disco ovalado de borde con flecos. En su parte central aparece nuevamente la cruz con los cinco puntos, o el llamado quincunce. Para Von Winning significan jade-turquesa. 

En el talud del tercer cuerpo, se repiten los mismos motivos representados en el talud del segundo cuerpo. Es decir, hay aquí colocadas en una fila horizontal figuras estilizadas de conchas y caracoles en representaciones diferentes. 

El tablero de este cuerpo y sus molduras se adornan profusamente. En el tablero se representa el llamado Tláloc B con los elementos  que lo caracterizan: orejeras, anteojeras, colmillos de jaguar y lengua bífida. Lleva una banda bifurcada en la cabeza que cae hacia los lados, sobre ella se aplican entrelaces y cuatro pequeñas figuras rectangulares que conforman el repetido quincunce. Dos penachos de plumas se colocan hacia los lados, con cinco turquesas verdes según Von Winning. Además se representa nuevamente el quincunce y de acuerdo con el dibujo de Miller, se miran en este panel cinco figuras de Tláloc B.

En las molduras superior e inferior de este tablero se representa la serpiente emplumada dirigida hacia el centro de la fachada. Son estas serpientes, similares a las del tablero del primer cuerpo, pero hay detalles significativos que las distinguen; por ejemplo, en la cabeza llevan seis figuras del quincunce en vez de siete. En el cuerpo se representa  cuatro veces el signo “cuatro turquesa”, o la figura del quincunce con cuatro círculos pequeños; estos símbolos se alternan con hileras de colmillos de jaguar y penachos de plumas. Del hocico de la serpiente brotan chorros de agua, y su crótalo remata con una doble voluta adornada con una hilera de dientes de jaguar y un penacho de plumas. En las molduras laterales aparecen los discos o figuras ovaladas, en cuya parte central se muestra el quincunce o signo cosmogónico.